5 claves para hacer la limpieza de tu hogar

Limpiar el hogar es muy importante para su buen mantenimiento y el cuidado de la salud y el bienestar. Estas son cinco claves para hacer la limpieza en tu hogar de forma adecuada para que esta quede aseada y perfecta.

Prepararte para hacer la limpieza en tu hogar es fundamental, pero la hora de la verdad es cuando tienes todos los elementos a la mano y los espacios listos para comenzar. ¿Qué lugar escoges para asear primero?, ¿cómo calculas el tiempo que te toma limpiar el baño o las habitaciones? Todo depende. Estas cinco claves son muy útiles para dejar brillante tu casa o apartamento.

En lo posible, la limpieza en el hogar se debe hacer mínimo dos veces a la semana porque en varias partes se acumula una gran cantidad de bacterias. Muchas de ellas las llevamos nosotros a la vivienda después estar en el exterior y es importante erradicarlas por medio de prácticas de aseo responsables. Si solo puedes limpiar una vez a la semana, hazlo con empeño.

El momento de la limpieza, si bien puede no ser del gusto de todos, representa la oportunidad para integrarse, divertirse y compartir en familia, por eso lo ideal es que los habitantes de la vivienda —sin excepción— participen de manera activa. Tú como líder distribuyes las labores y asignas tiempos para desarrollarlas. ¿Qué tal si ponen un poco de música para entrar en ambiente y animarse?

Toma precauciones para prevenir caídas u otras afectaciones. Asegúrate de todos usen guantes, gafas protectoras y tapabocas si es necesario, sobre todo para limpiar el baño, el balcón o la cocina. La seguridad es un principio del aseo adecuado.

Descubre en la siguiente infografía lo que debes tener en cuenta para hacer la limpieza en tu hogar. Delega, no impongas, no te sobre esfuerces en caso de agotamiento o no poder realizar movimientos bruscos y disfruta el consentir tu vivienda.

¿Cómo hacer la limpieza de forma satisfactoria y en orden?

1. Determina qué espacio de tu hogar requiere con más urgencia ser aseado: puede ser el baño o la cocina, tu habitación o el comedor. Si bien todo demanda atención, es importante que el lugar en el que duermes o te bañas esté en condiciones óptimas para que aporte a tu bienestar y al cuidado de tu salud.

2. Ten cuidado qué elementos usas para limpiar: la madera puede no resistir ciertos líquidos; lo mismo pasa con el mármol o el acero. ¡Piensa, incluso, en tus electrodomésticos! Lee las etiquetas de los productos de limpieza para saber en qué no pueden ser usados y cuáles son las precauciones que debes tener para su correcta manipulación.

3. Limpiar puede ser el mejor momento del día: la familia no solo está aseando la casa, sino compartiendo, trazándose un objetivo común que es ver, al final, los espacios ordenados y relucientes. Construyan el hábito de asear juntos para que se entretengan y la tarea no recaiga en una única persona.

Articulo tomado del Blog de Seguros Sura (Link)